Dado que la demanda de productos de belleza y cuidado personal respetuosos con el medioambiente es muy potente, la industria le está dando respuesta. Sin embargo, aún queda margen para crecer: los consumidores necesitan más información y pruebas de que algunos productos son más sostenibles que otros. Mientras, los consumidores van más allá de los reclamos que figuran en las etiquetas y llevan a cabo sus propias investigaciones sobre las credenciales de las marcas en materia de sostenibilidad. Esto significa que las marcas se verán sometidas a mayor presión a la hora de demostrar que sus prácticas se basan en la ética ecológica en toda la cadena de producción, desde los ingredientes hasta el proveedor de cosméticos.
La demanda de pruebas más cuantificables aumenta junto con la creciente demanda de productos más respetuosos con el medioambiente. Según un nuevo informe de la asociación UEBT (Union for Ethical Biotrade), el 82 % de los consumidores opina que las marcas tienen la obligación moral de garantizar que tienen una repercusión positiva en las personas y en la biodiversidad. Mientras tanto, solo el 42 % de las empresas potentes realmente presta la debida atención al abastecimiento ético.
Los consumidores que compran productos de belleza ecológicos quieren tener pruebas de que sus opciones de compra son mejores para el medioambiente, sobre todo si pagan más por ellas. Sin embargo, están dispuestos a hacerlo. Actualmente, cerca de una cuarta parte de las estadounidenses afirma estar dispuestas a pagar más por productos elaborados con ingredientes sostenibles (Mintel, 2019). Por tanto, es esencial que las marcas de belleza y cuidado personal aprovechen esta oportunidad.
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Qué buscar en un proveedor de cosméticos respetuoso con el medioambiente
Una gama de productos totalmente sostenibles comienza eligiendo al proveedor de cosméticos adecuado. Los fabricantes de cosméticos tendrán cadenas de producción propias, por lo que, a la hora de elegir al socio apropiado, la marca debe evaluar cinco criterios clave basados en la ética ecológica: el abastecimiento de los ingredientes; la eficacia y la sostenibilidad de sus procesos de producción; el consumo de agua y la gestión hidrológica y el consumo de energía y la política de gestión de residuos.
Abastecimiento de ingredientes
La base de una cadena de producción ética y sostenible comienza por las materias primas. Un proveedor de cosméticos debe obtener los ingredientes de una manera que trasmita la diversidad biológica y ofrecer acceso y participación en los beneficios de los recursos naturales del planeta. Un buen punto de referencia serían los siete principios del biocomercio, que resumen los reglamentos y los permisos necesarios para alcanzar un abastecimiento de ingredientes sostenible.
Procesos de producción sostenibles y eficaces
Los proveedores de cosméticos sostenibles trabajan constantemente para conseguir una mayor optimización de sus procesos de producción. Esto se mide mejorando año tras año los indicadores ambientales, incluidos el consumo de agua, combustible, electricidad y CO2 y los residuos generados por kilo de producto producido. Naturalmente, las marcas deben procurar, sobre todo, colaborar con un proveedor de cosméticos que trabaje activamente en reducir el consumo total de energía. Otro indicador clave sería la proporción de fuentes de energía renovable que se utilizan con respecto a los combustibles fósiles.
Consumo de agua y gestión hidrológica
El agua es un recurso natural fundamental y su conservación forma parte integral de las prácticas de producción sostenibles. Según Water Aid, en 2016 unos 3 600 millones de personas vivían en zonas con escasez de agua, y se espera que esta cifra ascienda a cerca de 5 000 millones en 2050. Teniendo en cuenta el uso intensivo de agua del sector, las marcas deben buscar fabricantes de cosméticos que cuenten con una política de conservación del agua. Por ejemplo, Provital ha reducido su consumo de agua por kilo de producto producido en más del 40 % en los últimos seis años.
Gestión de residuos y economía circular
La industria cosmética debe esforzarse por avanzar hacia una economía circular. Muchos productos derivados de los procesos de abastecimiento y producción tienen potencial para ser reutilizados o reciclados. Y dado su posible valor, se trata de una oportunidad que los fabricantes de cosméticos no deben dejar pasar. Actualmente, Provital procesa el 70 % de los residuos que genera de conformidad con los principios de la economía circular.
Pedir cuentas a los fabricantes de cosméticos
Los consumidores muestran cada vez más curiosidad por el origen de los ingredientes y los métodos de producción. Actualmente, el 47 % de las estadounidenses afirma que presta más atención a los ingredientes con los que se elaboran sus productos de belleza con respecto al año anterior, por lo que es cada vez más importante que las marcas sean transparentes acerca de los ingredientes y los procesos que utilizan y las razones que tienen para hacerlo (Mintel, 2019). Esto pone de relieve el creciente interés que tienen los consumidores en pedir cuentas a los fabricantes de cosméticos. Por tanto, es esencial elegir al socio adecuado para la producción.
Provital se define como un proveedor totalmente sostenible. Prestando especial atención a reducir nuestro impacto ambiental y a invertir en productos que tienen una biodiversidad distintiva, Provital es un proveedor de cosméticos en el que pueden confiar las marcas de productos de belleza ética. Como miembro de UEBT y titular de varias acreditaciones naturales y éticas independientes, las prácticas de Provital favorecen la demanda de los consumidores de una total transparencia en cuanto a la cadena de producción. A medida que aumenta la demanda de belleza ecológica, Provital sigue estando a la cabeza.
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