Dada la cantidad de personas que utilizan cosméticos a diario, no es de extrañar que cada vez más gente se preocupe por las fórmulas y los ingredientes. De hecho, los consumidores empiezan a preocuparse incluso por ingredientes no activos, como los conservantes de las fórmulas. Es aquí donde entra en juego la tendencia Clean Beauty. El concepto «clean beauty» se basa esencialmente en la idea de consumir conscientemente productos cosméticos elaborados sin sustancias sospechosas o conocidas de ser tóxicas o nocivas. Siguiendo esta idea, muchos esperan encontrar cosméticos sin conservantes con los que sustituir su producto actual, a fin de evitar posibles efectos secundarios.
Si bien ahora todos los productos cosméticos comerciales deben ser testados por una organización reguladora de la salud, muchos entusiastas del concepto clean beauty siguen preocupados por ciertos ingredientes, en concreto los conservantes tradicionales de los productos, ya que se ha descubierto que tienen ciertos efectos secundarios. Ante esta creciente preocupación, muchos fabricantes de productos de belleza están optando por incorporar ingredientes con propiedades conservantes naturales para prescindir de los conservantes tradicionales. La integración del conservante natural en cosmética puede hacer que los productos se conserven durante más tiempo, al tiempo que minimiza los posibles efectos secundarios.
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Conservantes más habituales en cosméticos destinados a los consumidores
En las fórmulas cosméticas, los conservantes hacen que un producto sea almacenable y evitan que las bacterias crezcan con el paso del tiempo. Los conservantes tradicionales, como los parabenos, el formaldehído y las isotiazolinas, se encuentran en muchos productos comerciales y han demostrado su eficacia para mantener los productos frescos y a salvo de bacterias. Sin embargo, aunque las organizaciones reguladoras de la salud los consideran seguros, la aceptación de la gente a los conservantes tradicionales no deja de disminuir.
De acuerdo con diversos estudios, aunque los conservantes tradicionales pueden evitar que los productos cosméticos se estropeen, presentan varios efectos secundarios que preocupan a los consumidores.
- Parabenos
Los parabenos se encuentran en una gran variedad de protectores solares y productos para el cuidado del cabello. A pesar de que, con el fin de proteger a los consumidores, han sido aprobados por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA por sus siglas en inglés) como conservantes que previenen el moho y las bacterias, se ha descubierto que cierta cantidad de parabenos puede alterar los niveles hormonales y el estado natural de los sistemas endocrinos. - Formaldehído
Al igual que los parabenos, el formaldehído se utiliza para evitar el crecimiento de bacterias y puede ayudar a prolongar la vida del producto en almacenamiento. Sin embargo, cuando está presente en fórmulas cosméticas, el formaldehído ha provocado erupciones cutáneas o alergias en la piel en algunas personas. Además, ha sido catalogado como posible cancerígeno por el Programa nacional de toxicología de Estados Unidos. - Isotiazolinas
Aunque se consideran una sustancia antibacteriana y antifúngica, las isotiazolinas de los productos cosméticos se han relacionado con la aparición de dermatitis.
Nueva formulación: El conservante natural en cosmética
Aunque las formulaciones tradicionales con conservantes químicos presentan efectos secundarios, para mantener la frescura y eficacia de un producto cosmético es fundamental la prevención de bacterias y hongos. Esta es la razón por la que muchos fabricantes y marcas están adoptando ingredientes y fórmulas con componentes naturales antibacterianos, antifúngicos o antihumectantes. De este modo, los productos evitan la proliferación de bacterias y prolongan su vida en almacén, además de reducir las probabilidades de causar algún tipo de reacción en los consumidores.
Reducción de bacterias con ingredientes naturales
A fin de que las bacterias puedan desarrollarse en cualquier lugar, es necesario un cierto nivel de agua y humedad para que puedan crecer y multiplicarse. Para evitar que esto ocurra, el conservante natural en cosmética se elabora a menudo con materiales vegetales que limitan la actividad del agua o la producción de humedad dentro de un determinado producto. Gracias a esta limitación en la producción de humedad, los productos cosméticos pueden tener una formulación sin conservantes duradera y exenta de los posibles riesgos diarios que los conservantes tradicionales suponen para el consumidor.
¿Qué ingredientes naturales tienen propiedades conservantes?
- Pentilenglicol
El pentilenglicol es un compuesto derivado de la mazorca de maíz o del bagazo de caña de azúcar que ha demostrado ser un gran conservante en cosmética. Este compuesto tiene propiedades que impiden la actividad del agua, convirtiéndolo en antimicrobiano. Además, se ha demostrado que los productos que apuestan por el uso de pentilenglicol son bien tolerados por las personas que sufren de sensibilidad en la piel y problemas como la rosácea. - Ácido levulínico
El ácido levulínico es conocido por ser un excelente conservante natural, pues contribuye a mantener el equilibrio del pH de los ingredientes activos y no activos de una formulación cosmética. También favorece de forma directa el aspecto de la piel, ya que se ha descubierto que el ácido levulínico puede ayudar a suavizar la piel cuando se aplica. Se obtiene del mismo modo del bagazo de la caña de azúcar, a través de un proceso de hidrólisis y destilación. - Caprilato de glicerilo
El caprilato de glicerilo puede obtenerse de muchas plantas diferentes, como los aceites de coco, semilla de palma o de colza, lo que hace de él uno de los productos más accesibles usado como conservante natural en cosmética. De forma similar a los otros dos conservantes naturales de esta lista, el caprilato de glicerilo ayuda a mantener a raya la proliferación de bacterias. Este compuesto también es un conocido emoliente que mantiene las formulaciones cosméticas homogéneas durante más tiempo y evita que se separen.
Conserva tu belleza de forma natural con Provital
Gracias a la abundancia de ingredientes que pueden servir como conservante natural en cosmética y preservar la frescura de un producto, los consumidores ya no tienen que depender de los conservantes tradicionales para garantizar la calidad y la vida en almacén de algunos de sus cosméticos. A pesar de que los conservantes tradicionales funcionan y son seguros si se cumplen las condiciones adecuadas establecidas por los organismos reguladores de productos cosméticos, ahora los consumidores buscan ingredientes más naturales y sin efectos secundarios a la hora de elegir los productos que van a utilizar a diario.
Provital, consciente de lo importantes que son los ingredientes antibacterianos para formulaciones de larga conservación, trabaja constantemente en el desarrollo de ingredientes activos sin conservantes o que contengan ingredientes naturales con propiedades de conservación. A modo de ejemplo, basta mencionar el nuevo CareActive™ llamado Altheostem™. Provital utiliza pentilenglicol, ácido levulínico y caprilato de glicerilo para preservar la frescura y la potencia de su producto, ofreciendo a los consumidores un producto de alta calidad para un óptimo envejecimiento y sin ninguno de los conservantes tradicionales que suelen considerarse perjudiciales.
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