En el mercado actual de la belleza y el cuidado personal, analizar ingredientes cosméticos se ha convertido en algo fundamental. A medida que la tecnología ha facilitado el acceso a la información, los consumidores son cada vez más hábiles a la hora de investigar y elegir productos. Para las marcas, esto implica que cualquier reclamo o afirmación debe ser validada, y la eficacia de los ingredientes debe estar probada y respaldada por datos. En este sentido, analizar ingredientes cosméticos de una forma transparente es más importante que nunca.
Hay varias razones que lo justifican. En primer lugar, las retiradas de productos, las promesas cuestionables, el greenwashing y las prácticas comerciales dudosas han hecho que los consumidores sean más desconfiados. A esto hay que añadir la situación de inflación y pérdida de poder adquisitivo actual, que ha provocado que el consumidor sea más consciente de sus decisiones de compra, incluyendo tendencias como el auge de las herramientas de seguimiento de precios y productos.
Más aún, esa necesidad se ha agudizado por el hecho de que los consumidores de hoy no solo están más informados, sino que también están más interconectados: gracias a redes sociales y portales de reseñas, nunca ha sido tan fácil difundir información sobre malas prácticas empresariales.
Es en este contexto en el que han irrumpido con fuerza las apps para analizar ingredientes cosméticos, una tendencia que habla de la necesidad de formular productos en línea con las sensibilidades actuales, y de adoptar políticas de total transparencia a la hora de comunicar los beneficios de los ingredientes utilizados.
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Cómo analizar ingredientes cosméticos: una lista de ingredientes alineada con las sensibilidades actuales
Analizar ingredientes cosméticos pasa, en primer lugar, por entender qué tipo de elementos suelen incorporar en las fórmulas para el cuidado de piel y cabello. Así, los productos cosméticos pueden estar formulados en base acuosas o lipídicas, e incorporar los siguientes elementos:
- Principios activos: son los que proporcionan los beneficios específicos del producto para mejorar la salud de la piel o tratar una condición específica. Pueden incluir vitaminas, antioxidantes, extractos de plantas, péptidos y ácidos (como el ácido salicílico).
- Ingredientes auxiliares: ayudan a lograr una formulación específica. Se incluyen aquí emulsionantes (capaces de mezclar ingredientes acuosos y oleosos), conservantes (que previenen la contaminación microbiológica), y las posibles fragancias o colorantes, que buscan mejorar la estética o la experiencia del consumidor al usarlo.
Los consumidores interesados en analizar ingredientes cosméticos están cada vez más acostumbrados a acudir a la lista INCI para tener información completa sobre el tipo de ingredientes presentes en un producto. No obstante, también han surgido con fuerza las apps para analizar ingredientes cosméticos, que buscan facilitar el acceso a esta información para los consumidores.
En base a estas dos preocupaciones, destacan la preocupación creciente por detectar el uso de los siguientes ingredientes, considerados como poco seguros:
- Parabenos
- Siliconas
- Conservantes
- Microplásticos
- Ingredientes de origen animal, en el marco de la tendencia de belleza vegana. Se incluyen aquí ingredientes como la elastina, keratina, colágeno, o la lanolina.
A la par que surge con fuerza la tendencia para analizar ingredientes cosméticos y encontrar fórmulas sin parabenos y otros ingredientes sintéticos, también lo hace la búsqueda de alternativas a este tipo de productos.
El desarrollo de la cosmética botánica o la búsqueda de conservantes naturales para formulación cosmética son dos de los movimientos clave a entender aquí.
Simplicidad y transparencia: claves para responder a los consumidores ávidos en analizar ingredientes cosméticos
No es de extrañar, pues, que la demanda de productos con ingredientes naturales también haya aumentado. Según la encuesta de Euromonitor ‘International Voice of the consumer: Beauty Survey for 2023’, el 23% de los consumidores de cosmética buscan productos naturales u orgánicos. Además, el año anterior, el mismo estudio halló que un 17% de los consumidores a nivel global estaban influenciados por los ingredientes utilizados en las formulaciones al comprar productos para el pelo.
Igualmente revelador resulta el estudio ‘Transparency Trends’ elaborado por NielsenIQ y la Food Industry Association, que halló que la proporción de consumidores que se preocupaban de que la información de los productos fuera transparente creció del 69% en 2018 al 76% en 2023.
Una de las formas de responder al consumidor ávido por analizar ingredientes cosméticos por parte de las marcas es a través de las certificaciones, que verifican que las formulaciones se atienen a sus claims específicos.
Un movimiento fundamental que también debe aplicarse a analizar ingredientes cosméticos respecto a su huella ambiental.
Otra tendencia clave es minimizar el número de ingredientes en las fórmulas de los productos. Se abre aquí la puerta a la belleza clean y minimalista, que a menudo implica narrativas que destacan el número de ingredientes utilizados y el tipo de pruebas y análisis al que han sido sometidos.
Para ello, las marcas deben poner el foco más que nunca en analizar ingredientes cosméticos de una manera exhaustiva. Se incluye aquí la necesidad de aliarse con proveedores cosméticos capacitados para proporcionar ingredientes sostenibles, seguros y 100 % rastreables, como la serie Kera de Provital, y los ingredientes cosméticos Keratrix™ para el cabello dañado y debilitado y Keranutri™ para un cabello más fuerte y denso.
Desde Provital, queremos convertirnos en aliados para las marcas que buscan llevar sus formulaciones al siguiente nivel, ayudándoles a alinearse de forma orgánica con la tendencia en analizar ingredientes cosméticos de los consumidores.
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